Reseña: “Drácula: Mar de sangre”

: Erick Moreno | Eder Quintero; 17 Agosto 2023

Reseña: “Drácula: Mar de sangre”

Imágenes: Cortesía Universal Pictures

Llega a las salas de cine “Drácula: Mar de Sangre”, un capítulo que el mismo Bram Stoker presentara en el año 1897 en su novela más conocida

“Drácula: Mar de Sangre” es una adaptación para cine que presenta el capítulo séptimo de la novela de Bram Stoker, “Drácula”, del personaje ya han conocido y que permanece en el remanente social colectivo del mundo entero. Esta película lo presenta de una manera muy adecuada dentro de una historia de la vida marina en la que se conjugan personalidades interesantes que le dan sentido al transcurrir de los hechos que te penen en suspenso.

Un capitán que está pensando realizar el último viaje de su vida y acepta el recorrido hacia Inglaterra para llevar un misterioso cargamento que, de poder realizar, ganaría junto a su tripulación una cuantiosa remuneración a manera de bono por llegar en el menor tiempo posible y realizar la entrega. Sin embargo, desde antes de zarpar, misteriosos acontecimientos advierten que dicha misión no está libre de problemas o de la influencia de alguna maldad no conocida.

Superando algunos problemas al elegir a la tripulación y al momento de iniciar el viaje, pronto se descubre que una polisona pone en riesgo el resto del viaje, principalmente por la superstición de que llevar a una mujer abordo es de mala suerte y que seguramente los dioses del mar pedirían su vida a cambio de permitirles llegar a buen puerto para continuar surcando los mares. No obstante, un médico abordo decide ayudar a la chica realizándole transfusiones de sangre para combatir el virus que la aqueja.

Llena de oscuridad, tensión, mucho suspenso y momentos escalofriantes, “Drácula: Mar de Sangre” va de menos a más en la presentación del mítico ser maligno en su viaje de un continente a otro, en busca de más alimento y de perpetuar su existencia a costa de la sangre y vida de las pobres almas que ni siquiera sospechan de su existencia.

“Drácula: Mar de Sangre” se desarrolla principalmente en la oscuridad y esto permite que la esencia escalofriante se mantenga prácticamente durante todo el filme, justificándose obviamente en una de las máximas debilidades del sanguinario vampiro, quien se muestra siempre como un monstruo humanoide alado, por lo que la película, casi en su totalidad, nos mantiene alejados del hombre adinerado y elegante que hipnotiza a las mujeres o que no se refleja en los espejos.

“Drácula: Mar de Sangre” logra conectar con el público gracias a los eventos que se desarrollan, mas no particularmente por los personajes al no desarrollarlos nutritivamente, por lo que difícilmente generan empatía con el espectador. Lo que es digno de agradecer es que al menos una de las muertes no es del todo anticipada, dadas las normas no necesariamente escritas de la industria.

Al final, si bien “Drácula: Mar de Sangre” explora tan solo uno de los capítulos de la popular novela, deja sentadas las bases para que existan más entregas del mítico personaje.