Imágenes: 20th Century Fox
Una de las sagas más importantes de todos los tiempos vuelve a comenzar, pero ahora con tecnología 3D; disfruta “Star Wars. Episodio I: La Amenaza Fantasma” como nunca antes.
Hay una tensa relación entre el planeta Naboo y la Federación del comercio, por lo que los Caballeros Jedis Qui-Gon Jinn (Liam Neeson) y Obi-Wan Kenobi (Ewan McGregor) son enviados para negociar y así terminar el conflicto; sin embargo, los planes de la Federación son otras, pues buscan invadir Naboo y capturar a la Reina Amidala (Natalie Portman) y obligarla a firmar un tratado, mismo que, todo indica, está propuesto por un poder desconocido.
Con ayuda de los Jedis, la Reina Amidala logra escapar de sus captores y busca el apoyo del Senado para dar por terminada la invasión. En su camino conocen al pequeño Anakin Skywalker (Jake Lloyd), quien no duda en ayudar a los desconocidos gracias a sus habilidades, mismas que rápidamente llaman la atención de Qui-Gon, considerando que tal vez sea este niño el que devuelva el equilibrio a la fuerza, la cual, el consejo Jedi, sienten con un gran disturbio.
Poco se puede agregar a la saga que revolucionó la industria cinematográfica en cuanto a efectos especiales. Si bien es cierto que cuando se filmó no se pensó en 3D, el arreglo que lograron es lo suficientemente agradable a la vista dándole una profundidad a los escenarios permitiendo disfrutar aún más de ellos. Desde luego, la carrera de pods y los enfrentamientos con espadas láser cobran una presencia aún mayor. El estreno es exclusivo para salas 3D y 4DX.