Imágenes: Cortesía Sistema de Teatros de la Ciudad de México

El Teatro de la Ciudad Esperanza Iris fue el majestuoso recinto elegido para celebrar estos primeros 130 años de funciones del muy querido Circo Atayde Hermanos.

En este emblemático lugar se ofrecieron únicamente dos funciones, en la primera se develó una placa alusiva a este aniversario, el cual tuvo como padrinos al actor y productor de teatro, Jorge Ortiz de Pinedo y, a la muy reconocida periodista, Cristina Pacheco, quienes se congratularon de ser los encargados de entregarla a Alberto Atayde (Director) y a su hija Celeste Atayde (Directora Artística).

Durante dos horas de espectáculo, los asistentes gozaron minuto a minuto disfrutando de un clásico acto circense, donde el malabarista (Alexis Atayde) nos deleitó con sus múltiples pelotas, los payasos (Los Estrouberry Clowns: Erick Murias y Fernando Holdall) hicieron gala de su rutina; así como los payasos cómicos musicales, Guillermo Campa “Topillo” y Alfonso Campa “Pompo”, con su peculiar estilo blanco, hicieron participe al público de su actuación.

Número a número, la escenografía se acoplaba para cada artista, como lo fue con los acróbatas en patines, el sensacional dúo Rousskary, conformado por Mariana Celaya y Aquino Núñez (Cuba), con las extraordinarias e inimaginables contorsiones de Aura Guzmán (México) o con la espectacular presentación de Marlene Solano (México) con las telas aéreas.

La magia y el ilusionismo estuvo a cargo del ya legendario mago Ary Sandy quien, acompañado de sus bellas asistentes, nos hicieron creer más de una vez que las partía en varios pedazos, para después restaurarla sin daño alguno.

Los malabares de rebote a cargo de Segio Paolo Parada (Chile), las argollas aéreas presentadas por Luisa Marinof (Bulgaria) y las cuerdas acrobáticas de 5to. Elemento, Isaac Muñoz, Gonzalo Velasco, Edgar Méndez, Víctor Ledezma y Alexis Soto (México).

Sin duda, honor a quien honor merece; gracias, muchas gracias a Circo Atayde Hermanos por remontarnos a una bella y melancólica infancia llena de ilusión.