Reseña: “La Crónica Francesa”

: Erick Moreno; 11 Noviembre 2021

Reseña: “La Crónica Francesa”

Imágenes: Cortesía Searchlight Pictures

Video: Cortesía Searchlight Pictures

Todas las grandes bellezas ocultan grandes secretos. De esto es de lo que se habla en la película “La crónica francesa” en la que se muestran todos los estratos sociales, culturales y económicos de una ciudad.

Con claroscuros, gran colorido y una música excepcional, el filme va enriqueciendo la experiencia de conocer a las mentes retorcidas y criminales de las que se obtiene un arte muy peculiar escondido detrás de un humor burdo y sangriento.

Tres son las historias interconectadas en este filme con ambientación suigéneris de una Francia de cualquier época en el que los talentos se dan hasta en las peores condiciones y que muy a su manera tratan de describir el mundo que les rodea.

Si bien el contexto de la película gira en torno a una editora de revista y a la última solicitud del director de terminar con la empresa y dejar atrás todo lo construido al momento de su muerte, bien va presentando el poder de la escritura y lo trascendental de esta en la historia del mundo vista desde la lente particular del escritor.

Así, los asesinos y delincuentes pueden tener talentos sobresalientes, como la pintura y una sensibilidad envidiable, entre otras cosas, que se ven en la pantalla grande, como lo es el arte culinario y el descubrimiento de sabores nuevos en alimentos llenos de veneno o los estilos de redacción de quienes pueden configurar un movimiento juvenil revolucionario o descripciones muy precisas sobre los estratos socioeconómicos.

En fin, la película va llevando al espectador a través de un recorrido de texturas, colores, sensaciones e historias entre exageraciones y dibujos animados para resaltar las posibilidades líricas que se desprenden del poder de la escritura.

Pero el verdadero problema llega cuando deben reunirse para escribir un obituario, el de su propio jefe y en el que van a discurrir todos los talentos y visiones de cada escritor mientras contemplan el cuerpo tendido de quien fuera el heredero de aquel imperio y que ahora yace tendido esperando una redacción periodística digna de su persona.

Una película divertida llena de sátira muy adecuada a nuestro tiempo en la que se sobre salta el poder de la prensa escrita, misma que quizá ya perdió su toque artístico, poético y sensible para volverse amarillista, insensible y superficial, recomendada solo para personas de mente abierta dispuestas a disfrutar del arte moderno.