En una jornada marcada por la constancia y el ritmo dominante, Max Verstappen se llevó la victoria en el Gran Premio de Emilia-Romaña, convirtiéndose en el primer piloto en la historia de la Fórmula 1 en ganar cuatro veces consecutivas en Imola. La carrera también marcó la edición número 400 del equipo Oracle Red Bull Racing en la categoría.