Reseña: “La Sra. Harris va a París”

: Erick Moreno; 03 Noviembre 2022

Reseña: “La Sra. Harris va a París”

Imágenes: Cortesía Universal Pictures

Una gran historia, narrada por grandes interpretaciones, que cautiva desde el primer instante; eso es lo que se puede apreciar en la película “La Sra. Harris va a París”.

“La Sra. Harris va a París” es una gran historia que versa sobre el duelo y, sobre todo, hace énfasis en la calidad y esencia interior de una persona que va generando cambios positivos a su alrededor y en cada una de las personas que se contactan bajo las más ridículas circunstancias de la vida que les hace coincidir con la Señora Harris quien, sin saberlo, encontrará nueva dirección en su vida una vez que realiza un inesperado viaje a París.

Con un humor muy inglés y muchas historias engarzadas en más que cada personaje lleva guardada una pérdida y, por lo tanto, un duelo no sanado, la historia va creando una serie de circunstancias a partir del momento en que la señora Harris se entera de que su marido ha perdido la vida al cumplir su deber militar y de inmediato desborda su tristeza en alcanzar un sueño dorado: Adquirir un vestido de la tienda más prestigiosa de ropa en Francia. Así que va ajustando sus gastos y encontrando nuevos ingresos para lograr hacer el viaje.

Pronto, las oportunidades de la vida le van ofreciendo ventanas donde pueda ganar dinero fácil y su credulidad en una guía superior le hace tomar más de una decisión que, al final, le terminan propinando fuertes bofetadas que a cualquiera le podrían derrumbar sus sueños y anhelos, pero no a la Señora Harris quien, con buena voluntad y temple, sigue adelante en su cometido de poder portar con elegancia el tan deseado vestido.

“La Sra. Harris va a París” también refleja el abuso de poder y la falta de educación y valores morales de aquellos que, estando en una mejor posición económica, tratan con desdén y de maneras muy irrespetuosas a quienes hacen labores domésticas y, por supuesto, a quienes no parecen pertenecer a un alto estatus socio económico, negándole un trato digno y humano que debiera aflorar de gente refinada que sólo sabe tratar como esclavos y objetos a quienes les dan su lealtad y su vida entera en las labores que realizan.

Pronto, las condiciones de vida de la señora Harris van mejorando a la par que ella va, influenciando con su carácter y educación, a todos aquellos que tuvieron la fortuna de toparse con ella, generando cambios sumamente radicales en las conciencias y modos de vida de todos ellos, hasta que, por fin y después de muchos inconvenientes divertidos, la Señora Harris obtiene su preciado vestido, pero aún no terminan las vueltas de la vida y pronto deberá enfrentar nuevos retos, decisiones y dilemas existenciales para poder continuar con su vida.

“La Sra. Harris va a París” maneja un mensaje tan valioso sobre la verdadera educación y sentido moral de una persona, independientemente de su estatus socio económico y, por otro lado, por la divertida forma de trabajar las causas y efectos, la toma de decisiones, la determinación de una persona a conseguir lo que sueña y la manera de lidiar con el dolor de haber perdido a una persona cercana.