Reseña: “Five Nights At Freddy’s”

: Eder Quintero; 26 Octubre 2023

Reseña: “Five Nights At Freddy’s”

Imágenes: Cortesía Universal Pictures

Video: Cortesía Universal Pictures

El popular videojuego “Five Nights At Freddy’s” da el salto del cine con una adaptación que toma el alma de la franquicia y añade lo necesario para formular una producción cinematográfica.

Una propuesta que creció rápido

En realidad, la saga de “Five Nights At Freddy’s” no data de mucho tiempo, pues no ha cumplido ni una década en el mercado; fue apenas en 2014 que el primer título vio la luz, pero rápidamente logró cautivar a un nutrido grupo de fans, lo que llevó a su creador Scott Cawthon a lanzar casi de inmediato su secuela. Desde entonces, se han lanzado juegos dentro de la cronología original, pero también algunos spin-offs permitiendo ampliar su público. Por si fuera poco, se han lanzado novelas que complementan al juego.

Ciertamente, el gameplay del título principal hacía muy difícil imaginar cómo es que podría llevarse al séptimo arte pues, aunque existe una historia detrás y se expande con algunos detalles que complementan la experiencia del juego, tampoco es que dé demasiadas herramientas para un contexto muy amplio; sin embargo, es justamente donde la película toma su valía pues logra formar una historia de todo ello para intentar presentar algo congruente con sus casi dos horas de duración. El resultado, sin embargo, tiene subidas y bajas, siendo las últimas las más constantes.

Dando forma más allá del videojuego

La película “Five Nights At Freddy’s” comienza con una propuesta que rápidamente capta la atención del espectador, incluyendo además referencias inmediatas al juego y que de inmediato nos sumerge en la tensión que normalmente se experimenta al jugarlo. De hecho, un espectador que no conoce la franquicia puede sentirse interesado en lo que va a ocurrir. Tristemente, todo se diluye muy rápido al centrar la atención en una historia paralela a partir de una integración del lore del videojuego.

Rápidamente conocemos a Mike (Josh Hutcherson) quien es atormentado por el recuerdo constante del secuestro de su hermano años atrás, lo que no le permite estabilidad en sus trabajos. Ahora vive cuidando a su hermana menor Abby (Piper Rubio) con la obligación encontrar un nuevo empleo o perderá la tutela; es así como decide aceptar un trabajo nocturno como guardia de seguridad en una pizzería abandonada con algunos animatrónicos con forma de animales. Lo que Mike desconoce es que estos curiosos personajes cobran vida y es el motivo por el que muchos otros guardias han renunciado o han desaparecido misteriosamente.

La primera noche de Mike en el lugar parece pasar de manera normal, pero comienza a tener sueños que agregan más elementos a su pasado. Al mismo tiempo, su tía Jane (Mary Stuart Masterson) busca hacerse con la tutela de Abby por beneficio económico; peor aún, su relación con la pequeña no es la mejor de todas. Entre tanto, la oficial Vanessa (Elizabeth Lail) intenta ayudar a Mike en su nuevo trabajo, pero sospechosamente parece saber mucho más del lugar de lo que ella misma dice.

Pasado de noche

Si bien “Five Nights At Freddy’s” logra formar una historia con lo poco que podría haber rescatado del videojuego, lo cierto es que también se vuelve comúnmente floja y sin sentido dentro de la propia ficción, por lo que no logra conectar del de todo por el espectador, mismo que va perdiendo interés conforme avanza la trama que se torna extremadamente predecible. A esto se le suma un pobre desarrollo de personajes, acentuado debido a que se vuelve un recurso constante durante todo el filme, y actuaciones muy ligeras.

Al final, pese a que parece rodearse de él, el concepto del videojuego “Five Nights At Freddy’s” parece estar solo como pretexto y no se le saca el mayor jugo cuando debería, dejando a los animatrónicos con un papel un tanto cuestionable, opacando su gran recreación. Es cierto que se agradecen los guiños al videojuego, pero el manejo del guion pudo haberse propuesto de una manera muy diferente para que generara el estrés que un gamer experimenta durante las partidas pues la película tiende a lo burdo dentro el género, saliendo mejor librada en los momentos de humor, mismos que también llegan a ser involuntarios.