Imágenes: Cortesía Madness Entertainment

Video: Cortesía Madness Entertainment

En “Oshi No Ko: The Final Act”, la búsqueda de venganza de Aqua Hoshino llega a su punto culminante mientras los secretos del pasado salen a la luz. Esta adaptación live action del manga y anime combina drama, misterio y una profunda reflexión sobre la vida, la muerte y el legado.

Un viaje que trasciende la vida y la muerte

El manga “Oshi No Ko”, creado por Aka Akasaka, se ha convertido en un fenómeno cultural por su mezcla única de drama, crítica social y elementos sobrenaturales. Como es fácil imaginar, su popularidad le permitió tener su adaptación anime, pero también un live action (Prime Video) en el cual podemos ubicar la adaptación cinematográfica “Oshi No Ko: The Final Act” que expande la trama en todas direcciones para enriquecer la narrativa y enfatizar los motivos de todos los personajes hasta llegar a un desenlace satisfactorio. Cabe remarcar que la inclusión intercalada de imágenes de la serie refuerza el impacto emocional.

“Oshi No Ko” explora el oscuro mundo del entretenimiento a través de la historia de Ai Hoshino y sus hijos reencarnados, Aqua y Ruby. “The Final Act” adapta los arcos finales del manga, llevando la historia a un clímax emocional. Pero, al mismo tiempo, retoma adecuadamente el inicio de todo, mostrando a la pequeña Sarina (Kurumi Inagaki) en su agonía. Su doctor, Goro Amamiya (Ryo Narita), eventualmente conoce y atiende como paciente a la idol Ai (Asuka Saitô), de la cual Sarina era fan y que ahora está embarazada, por lo que decide hacer una pausa en su carrera.

Un cierre emotivo y reflexivo

La tragedia va envolviendo la trama de “Oshi No Ko: The Final Act” con los asesinatos del Dr. Amamiya y de la propia Ai quien deja huérfanos a sus gemelos Aqua (Kaito Sakurai) y Ruby (Nagisa Saito). Las cosas se tornan muy curiosas cuando Aqua se da cuenta de que se trata del Dr. Goro reencarnado, comenzando así una búsqueda de venganza, tras descubrir la verdad detrás del asesinato de su madre. Entre tanto, Ruby comienza su propia carrera como una estrella idol, pero su éxito oculta heridas profundas. Debo decir que este contexto de reencarnación me recordó a “Fluke” (1995), aunque en esa película el protagonista era un perro.

Si bien la trama es emocionante y llena de giros, el tercer acto se siente alargado y predecible en algunos momentos. Sin embargo, la película logra mantener la atención del espectador gracias a su enfoque en los dilemas morales de los personajes y la reflexión sobre temas como la reencarnación y el propósito de la vida. Las actuaciones, aunque constantemente exageradas, funcionan bien para mantener el tono anime de la historia, con los niños destacando por su naturalidad en sus interpretaciones.

“Oshi No Ko: The Final Act” destaca por el tratamiento en la iluminación, generando atmósferas misteriosas y resaltando las emociones de los personajes. A su vez, la música, aunque no memorable, acompaña adecuadamente la narrativa, con algunos momentos destacados en los números musicales. En definitiva, aun con ciertas limitaciones técnicas, la película logra capturar la esencia de la historia original, ofreciendo un cierre satisfactorio para los fans.

Detalles de Oshi No Ko: The Final Act

Trailer de Oshi No Ko: The Final Act