Imágenes: Cortesía Warner Bros. Pictures

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En lo que podríamos catalogar como una grata sorpresa, Ben Affleck regresa como el calculadoramente letal Christian Wolff en “El Contador 2”, una secuela que eleva la apuesta en acción y dinamismo. ¿Logra esta nueva ecuación superar el intrigante enigma de su predecesora?

Más acción, menos cálculo

La película original, “El Contador” (2016), nos presentó a un matemático altamente inteligente con autismo que lleva una doble vida. Con un tono pausado, la película se centró en su altísima habilidad para los números y en sus habilidades letales. Para “El Contador 2” la trama toma un rumbo ligeramente diferente, intensificando la acción y permitiendo que Christian (Affleck) despliegue sus talentos de combate de manera más prominente al lado de su férreo hermano Braxton, interpretado con carisma por Jon Bernthal.

Si bien su genio matemático sigue siendo un elemento clave, la secuela impulsa al protagonista hacia un terreno más dinámico, incluso incorporando a un equipo de jóvenes hackers que amplían sus capacidades operativas. Asimismo, se profundiza mucho más en la relación con su hermano convirtiéndose en uno de los pilares emocionales de la película y añadiendo capas a la compleja personalidad de Wolff. En este aspecto, destaca la gran química de Affleck y Bernthal en pantalla, logrando un grato equilibrio entre drama, acción y humor.

Nuevo misterio por descifrar

Muy temprano en la película atestiguamos el asesinato de Ray King (J.K. Simmons) lo que de inmediato pone en marcha una investigación liderada por Marybeth Medina (Cynthia Addai-Robinson), quien se ve obligada a recurrir a la ayuda de Christian para desentrañar el misterio. Pese a la evidencia lanzada rápidamente, la película logra mantener cierto grado de intriga al introducir la figura de una misteriosa y letal asesina.

Si bien el desarrollo narrativo se siente, por momentos, semilento, con pasajes donde la trama parece estancarse, la película sabe cómo reenganchar al espectador con un gag oportuno o una revelación que impulsa la historia hacia adelante, aunque en general la duración podría haberse ajustado para mantener un ritmo más constante. Asimismo, el personaje de Medina se siente más como un recurso para exponer la trama que como un personaje completamente desarrollado; en definitiva, hace extrañar a Anna Kendrick, pero se agradece que Addai-Robinson escale en protagonismo.

Evolución contable

Técnicamente, “El Contador 2” es una producción correcta. La fotografía está bien lograda, creando una atmósfera adecuada para un thriller de acción. El diseño de producción cumple su función sin ser particularmente llamativo, pero establece escenarios creíbles para el desarrollo de la trama. La música acompaña de manera efectiva los momentos de tensión y las secuencias de acción, mientras que el diseño sonoro es competente y ayuda a sumergir al espectador en los tiroteos y enfrentamientos.

Se nota que el director Gavin O’Connor ha entendido a la perfección de lo que se trataba el personaje y lo ha plasmado no en una, sino en dos películas, cimentando lo que ya puede catalogarse como una franquicia rentable. Esto sin duda, deja la mesa puesta para que la saga trascienda a nuevas aventuras. De esta forma, “El Contador 2” expande el universo de Christian Wolff, como un héroe fuera de lo común, ofreciendo una secuela que equilibra la intriga de su predecesora con una dosis más generosa de acción.

“El Contador 2” continúa genuinamente con la historia propuesta en la película original y profundiza en la acción dejando la tensión a un lado. Aun así, se siente la esencia de su predecesora en todo momento con un enfoque menos cerebral. Ciertamente, el ritmo podría ser más ágil y el desarrollo de algunos personajes más profundo; lejos de ello, esta entrega cumple como una secuela entretenida para aquellos que disfrutaron de la primera y para una nueva audiencia.

Detalles de El Contador 2

Trailer de El Contador 2