Imágenes: Cortesía FIFA

Camerún y Serbia habían perdido sus respectivos encuentros en la primera jornada, por lo que tenían que salir a ganar para tener alguna posibilidad de calificar a la siguiente ronda. El resultado fue empate 3-3, en el partido más emocionante de la segunda jornada.

Juego de volteretas

Ambos equipos salieron con la intención de hacerle daño a su rival propiciando subidas y bajadas en un partido semiabierto. Los africanos fueron los que abrieron el marcador cuando, en un tiro de esquina, peinaron el balón para que Jean-Charles Castelletto cerrara puntualmente para poner el 1-0 al 29’. Ninguno de los dos cedió terreno y mantuvieron un ritmo que les permitió generar más oportunidades.

Ya casi para terminar el primer tiempo, Serbia logró darle la vuelta al marcador en tan solo 2 minutos; primero Strahinja Pavlović remató de cabeza un centro de tiro libre para emparejar el marcador (1-1) al 45’+1. Después, con los europeos aprovechando el desconcierto rival, Sergej Milinković-Savić sacó un tiro de media distancia para clavar la remontada (1-2) al 45’+3 con cierta complicidad del arquero Devis Epassy, quien relevó a André Onana ante su polémico abandono de la competencia por no estar de acuerdo con su entrenador.

Como si fuera una final

Poco tiempo pasó del arranque de la segunda mitad, al 53’, para que los serbios se pasearan por toda el área camerunés dejando solo a Aleksandar Mitrović quien, tras varias fallas en el duelo, finalmente encontró su anotación (1-3). Aunque todo parecía sentenciado, llegó un cambio revulsivo para los africanos con la entrada de Vincent Aboubakar, quien le dio otra cara a su escuadra.

En 3 minutos, Camerún encontró el empate gracias a dos trazos largos encontrando el espacio. El primer servicio lo tomó Vincent Aboubakar quedando solo frente al portero Vanja Milinković-Savić al que recortó y bombeó el balón para acercarse 2-3 al 63’. Posteriormente, el mismo Aboubakar sirvió otro pase largo para dejar a dos compañeros frente a frente contra el arquero; el encargado de definir y empatar 3-3 fue Eric Maxim Choupo-Moting al 66’.

El futuro en el aire

Los cameruneses cobraron confianza e incluso realizaban jugadas de fantasía, pero los serbios se recuperaron del duro golpe de perder su ventaja, así que se convirtió en un enfrentamiento de ida y vuelta. Ya en los últimos 10 minutos el ritmo decayó y ambas selecciones se mostraron más reservadas al tomar más precauciones para no perder el encuentro y dejar todo abierto para la última jornada.

Camerún enfrentará a Brasil en su último partido de grupo, mientras Serbia hará lo propio contra Suiza. Ambos tienen oportunidad de calificar si logran vencer a sus respectivos rivales.