Imágenes: Cortesía FIFA
Brasil enfrentó a Suiza con el compromiso de desplegar su mejor juego y así asegurar su calificación a octavos de final; al final, consiguió la victoria 1-0.
Suiza anulando a Brasil
Brasil comenzó proponiendo a la ofensiva con toques de primera intención, intentando mantener un ritmo agresivo y tuvo acercamientos peligrosos con llegadas por ambos costados e intentos para perforar al área, con recursos como disparos de media distancia. Por su parte, Suiza se mantuvo prudente, fortaleciendo su defensa, sin olvidarse de la delantera; no obstante, fueron los sudamericanos los que tuvieron la oportunidad más clara con un remate de Vinicius Júnior que el arquero Yann Sommer contuvo sobresalientemente.
Poco a poco, fue controlado el acoso brasileño que bajó de intensidad para algunos cambios de ritmo más aislados. Brasil ya no encontraba su “Jogo Bonito” toda vez que los europeos cerraron muy bien los espacios para dejar que el tiempo continuara fluyendo hasta el final de la primera mitad con el marcador sin moverse (0-0).
Con sangre de campeón
Suiza manejó el inicio del segundo tiempo, impidiendo que el “Scratch Du Oro” desplegara su poderío con facilidad; no obstante, la Verdeamarela sostuvo el peligro y, ya para el último tercio del encuentro, encontró un gol a pies de Vinicius Júnior, pero fue anulado por un apretado fuera de lugar marcado por el VAR. Eso tan solo fue un anuncio, porque los toques de primera intención regresaron, incluyendo un disparo de volea de Casemiro que significó el 1-0 al 83’.
Los brasileños se soltaron atacando alegremente buscando la segunda anotación, mientras los helvéticos trataban de contenerlos con la necesidad de cometer algunas faltas y sin las ideas suficientes para ofender de manera contundente. Poco antes del silbatazo final, fueron los de a CONMEBOL los que tuvieron un par de oportunidades más, sin mayores consecuencias.
Brasil se convierte en el segundo calificado a octavos de final y simplemente deberá tramitar el último partido para asegurar el liderato ante Camerún. Del otro lado, Suiza tendrá su último llamado ante Serbia.