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En una noche llena de nostalgia y pura energía, Laureano Brizuela, el icónico Ángel del Rock, cuyas raíces se hunden en la era dorada de los años 80, desató un torbellino de emociones en el Lunario del Auditorio Nacional, sin un asiento vacío. Un regreso a los escenarios estelares con el que marca la contundencia de su prestigio.
Ataviado en su clásico atuendo negro, lentes oscuros y su distintiva melena rizada, Laureano Brizuela se erigió ante sus devotos seguidores, proclamándolos como su audiencia predilecta tras 39 años de trayectoria musical. Los gritos y ovaciones, apenas apareció, fueron ensordecedores.
Con una poderosa banda de músicos y coros, el ambiente se llenó con los acordes de sus himnos atemporales: “Yo Sin Ti, Tú Sin Mí”, “Si Quieres Amarme”, “Me Quedo Aquí Abajo”, y “Gritando Que Te Quiero”, provocando un torrente de emociones que inundó el recinto. Entre cada nota, palabras de amor y gratitud fluían sin cesar, alimentando la conexión única entre el artista y su público.
Más allá de las melodías, Laureano Brizuela compartió reflexiones profundas sobre el valor del amor en tiempos modernos, antes de interpretar con fervor “Tiempo Para Amarte”, una oda a la esencia perdida en la vorágine del día a día.
El momento álgido llegó cuando el artista se entregó con el clásico “Amándote”, una canción que el público ha hecho suya desde su mágica aparición en 1986, desatando una ola de nostalgia y euforia colectiva.
La gran sorpresa de la noche llegó con la aparición sorpresa de Benny Ibarra en el escenario, uniéndose a Laureano Brizuela para interpretar “(Que Todo Va a Estar) OK”, un himno de esperanza que grabaron en colaboración en 2021.
Continuando con el despliegue de energía desenfrenada siguió con sus éxitos “Viento del Sur”, “Muchachita”, versión en español del clásico “Pretty Woman”; “Enamorándonos”, versión en español de “(Just Like) Starting Over”, de John Lennon; y el mega hit “Sueños Compartidos”.
Para culminar la epopeya musical, Laureano Brizuela cerró el espectáculo con una apoteósica interpretación de “América”, de Neil Diamond.
Tras la feroz insistencia del público por escuchar más, Laureano Brizuela regresó al escenario a complacer a su incondicional público, con Alborada, y un reprise de Sueños Compartidos, dejando un legado imborrable en la memoria de todos los presentes.
Laureano Brizuela se perfila a realizar un próximo tour por toda la República Mexicana, Estados Unidos, Centro y Sudamérica.