Imágenes: Cortesía Ocesa | José Jorge Carreón
Carlos Vives presentó con gran éxito su tour “El rock de mi pueblo vive”, el pasado 7 de septiembre en el Auditorio Nacional como parte de la celebración de sus 30 años de carrera artística.
El cantante colombiano ataviado en jeans y playera negra puso a bailar de inicio a fin, a las casi diez mil personas de diferentes nacionalidades, que se dieron cita para disfrutar de su música alegre y 100% bailable.
Al filo de las 20:15 horas, luego de proyectarse un video que hace alusión a su infancia y su tierra natal, sonaron los primeros acordes de uno de sus más grandes éxitos, “La gota fría”.
“Gracias por todos estos años de cariño, muchas gracias. Sé que hay muchos colombianos esta noche que se funden con mis hermanos mexicanos y también sé que hay venezolanos a quienes quiero con un amor profundo”, señaló el oriundo de Santa Marta.
Acompañado de ocho músicos y tres coros, Vives, interpretó a lo largo de dos horas, “Fruta fresca”, “Déjame entrar”, “La bicicleta”, “La piragua”, “Casarme contigo”, “Ella es mi fiesta”, “Canción bonita”, “Rosa”, “Nota de amor”, “Carito”, “Volví a nacer”, “Pa’ Mayte”, entre otras.
Hizo un reconocimiento especial dedicado a su gente, a los venezolanos y a los hispanoamericanos: “Colombia es más grande que todas sus tragedias, por eso quiero cantarles esta canción… “Tierra del olvido”.
Para sorpresa de muchos, entonó a ritmo de ranchera, “Para morir iguales”, del gran compositor José Alfredo Jiménez.
Ya casi para finalizar su última presentación en México, cantó su más reciente tema “La chancleta”, el cual grabó junto a Carín León y Chimbala, para finalmente despedirse, en medio de una abrumante pirotecnia, de su efusivo público con “Robarte un beso”, reiterando así, que sigue gozando de una extraordinaria vitalidad y prodigiosa voz en el escenario.