Review: “Paint the town red”

: Eder Quintero; 04 Agosto 2021

Review: “Paint the town red”

Imágenes: Cortesía South East Games | Gameplay PoluxWeb.com

Video: Cortesía South East Games

“Paint the town red” se abre camino violentamente para llegar a PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X, Nintendo Switch y PC.

El último en pie

“Paint the town red” es un título directo, que invita a los jugadores a golpear todo lo que se le ponga enfrente sin mayor reparo; ya sea con la mano desnuda, a patadas o tomando lo primero que encontremos como arma. Para ello, encontramos 3 diferentes modos de juego; dos de ellos con el objetivo de ser el último personaje con vida tras una auténtica batalla campal y otro más que representa una especie de campaña estilo roguelike.

En el Modo Escenarios podemos elegir entre 6 diferentes locaciones para desatar una guerra sin cuartel entre todos los que se encuentran ahí; ya sea un bar, una discoteca, una prisión, un puerto pirata o un salón de juegos. Al inicio, todo parece una convivencia social, pero basta con dar el primer golpe para que todo se torne violento. Podemos tomar botellas, vasos, cuchillos, sillas y otros objetos regados en el escenario como armas para causar mayor daño.

Para aumentar la diversión al puro estilo de la vieja escuela, existe una gran cantidad de modificadores tales como gravedad cero, enemigos débiles, cámara lenta, comenzar con machete, eliminar armas, aumento de fuerza, grupo de amigos, etc. De esta manera, cada partida puede ser única y la carnicería es tan gore como nosotros la definamos. Obviamente, nuestro objetivo es ser el último en pie.

Supervivencia por cualquier medio

El Modo Arena nos sitúa en un auténtico coliseo con el objetivo de sobrevivir a 10 hordas de enemigos de todo tipo. Conforme sobrevivimos a los embates, la dificultad aumenta, pero también podemos valernos de las armas que los enemigos sueltan como chacos, nudillos, vasos, espadas y muchas más, así como de algunas trampas que se activan de vez en cuando. Cabe mencionar que, en algunas rondas, contamos con el apoyo de un grupo de amigos, pero normalmente no duran demasiado en pie.

Finalmente, el Modo Profundidades es la opción más parecida a la Historia, situándonos en unas instalaciones donde se realizan diversos experimentos. Debemos bajar a las profundidades eligiendo una de las cuatro clases (Vanguardia, Guerrero, Brujo o Espectro), cada una con poderes y habilidades específicas, para enfrentarnos a una gran variedad de mutantes. Conforme avanzamos, podemos cumplir con desafíos propuestos. Vale la pena remarcar que todos los recorridos son diferentes, por lo que encontramos cosas distintas cada vez que bajamos por una nueva dosis de acción.

Ciertamente se extraña algún modo multiplayer en las versiones de consola (en PC sí existe), pues sería una auténtica fiesta de sangre, ya sea cooperativa o competitiva.

Sencillez catártica

En cualquiera de los modos, nuestros movimientos son los más contundentes, aunque vale la pena activar la guía de botones antes de empezar con nuestro caos. En todo caso, podemos golpear (con puños o armas), patear, bloquear, saltar, agacharnos, correr, empujar, lanzar objetos y hasta activar poderes. Lo suficiente para intentar sobrevivir a la melee.

“Paint the town red” es uno de esos juegos que es tan sencillo y directo en su premisa que no necesita de las mejores gráficas o física para entretenernos por horas. Y es que, sí, visualmente es ridículamente simple, con diseños de personajes cuadrados y acartonados, pero aun así presentan detalles tales como moretones y sangre; a su vez, los escenarios son simples, aunque cuentan con el diseño suficiente para representar diferentes lugares, permitiéndonos interactuar con algunos objetos, además de mantener una dimensión adecuada de hasta dos pisos y diferentes cuartos para ampliar la acción.

Cabe mencionar que la versión de PC cuenta también con un editor de escenarios que, lamentablemente, no está disponible en las consolas. Nosotros tuvimos la oportunidad de probar el juego en Nintendo Switch y se convierte en una excelente opción para sacarle todo el jugo a la consola ya sea en el dock o como portátil al ser un juego con partidas rápidas que nos permite jugar tanto tiempo como queramos o según nuestra disponibilidad de tiempo. Ciertamente los tiempos de carga son un poco más largos de lo ideal y existen algunas ralentizaciones debido a la cantidad de elementos en pantalla, sobre todo las partículas de sangre; aunque es algo que realmente no afecta mucho al desarrollo de la acción, sí se percibe significativamente.

Por otro lado, vale la pena mencionar que el audio, pese a la sencillez del juego, no ha sido descuidado e incluso cuenta con una distribución para distinguir de dónde provienen ciertos sonidos; aunque en realidad queda como un mero detalle, ya que no es demasiado útil. A su vez, la música es minimalista en extremo por lo que pasa sumamente desapercibida.

Pueblo chico, infierno rojo

Lo que llama mucho la atención es la gran cantidad de idiomas para los textos en pantalla: español, inglés, italiano, portugués, turco, alemán, griego, francés, japonés chino, coreano, entre mucho más. Claro que, en realidad, solo se ve reflejado en los menús, pues no existen diálogos y otros elementos que obliguen mayor traducción.

“Paint the town red” es un título sumamente entretenido que sirve para ratos tan breves o prolongados como se desee, con un alto grado de rejuego; eso sí, se extrañan más escenarios. Además, si a futuro se le agregara una opción multiplayer a las consolas, tendríamos un juego por demás redondo.

“Paint the town red” ya se encuentra disponible para PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X, Nintendo Switch y PC.