Reseña: “Todo en todas partes al mismo tiempo”

: Erick Moreno; 23 Junio 2022

Reseña: “Todo en todas partes al mismo tiempo”

Imágenes: Cortesía Diamond Films

Video: Cortesía Diamond Films

“Todo en todas partes al mismo tiempo” es el filme, con garantía Cinépolis, que da cachetada con guante blanco al absurdo exacerbado de la exageración mental que propicia conductas autodestructivas en el ser humano.

“Todo en todas partes al mismo tiempo” es una propuesta muy arriesgada de crítica cultural a la extralimitación de terminología pseudocientífica y al pensamiento humano predominante a través del humor y una mofa desmedida envuelta en superposiciones de conceptos científicos y otros del ámbito de la ciencia ficción, así como del entretenimiento en una historia tan absurda y vacía como la misma existencia humana sin que por ello la trama pierda la sustancia, haga reír continuamente, sorprenda y hasta permite la reflexión en medio de acción al puro estilo del kung fu.

Basta ponerle "un ojo" a este filme para encaminarse en dos vertientes: por un lado, estarán aquellos que comprendan el mensaje, dobleguen su ego y hagan un cambio en su Alphaverso, y; quienes en su simplicidad y egocentrismo tilden por basura que sólo entretiene y hace reír, pero sin que lleguen a profundizar en lo bello y trascendente del mensaje que enmarcan en “Todo en todas partes al mismo tiempo”.

Si eres de los del primer orden, ¡felicidades!, entre los millones de posibilidades de tus dobles cuánticos eres el que mayor coeficiente intelectual tiene. Por el contrario, si perteneces a los del segundo grupo, lamento informar que eres el peor de tus posibilidades y encarnaciones en cualquiera de los universos y quizá necesites hacer algún brinco a otro de los universos para adquirir un poco de conciencia y comprender la razón de la existencia o, por lo menos, de tu mísera existencia.

Para ayudar un poco en la contención del mensaje se debe tener en cuenta que la película “Todo en todas partes al mismo tiempo” es más que una burla a los conceptos de moda actuales y que no pretende menospreciar el avance científico; todo lo contrario, desea invitar a dar una mirada de nueva cuenta a la base en la que está afianzada la humanidad, pero no desde la ciencia, sino desde la sabiduría antigua y de la espiritualidad ya que el mensaje que se subraya en este filme es el mismo que grandes maestros de la humanidad, iluminados y avatares han venido expresando a lo largo de los siglos y que la humanidad insiste en ignorar.

Aquí se habla de esa palabra de cuatro letras que va mucho más allá de lo filial, de lo familiar, de lo carnal y del deseo o de la necesidad. Busca ir mucho más profundo, hasta el mismísimo Tao, a la búsqueda de ese esplendor interno que sostiene al único universo que hay invitando a la humanidad a volver a elegir, a cambiar de dirección y, sobre todo, a dejar el absurdo mental y apelar al corazón para transformar las vidas de cada persona con la que se contacte que no son mundos, sino universos y que están solicitando esa luz que los puede salvar.

Si te atreves a ver “Todo en todas partes al mismo tiempo”, tienes la opción de volver a elegir, de sanar tu locura y de generar el cambio o puedes continuar el camino del ego, de la perdición, del deseo, de la locura y la destrucción, perpetuando la maldad y la violencia que destruye todo a su paso y seguir como hasta ahora, aunque por lo menos podrás reír más de una vez o quizá a carcajadas durante toda la película y salir con una sonrisa fingida por diversión sin reparar en pensar en el mensaje que quizá no es para ti, que debe ser para un otro tú de mayor inteligencia emocional en algún otro paraje del universo.