Imágenes: Cortesía FIA
Con un Red Bull aparentemente imbatible, llega la tercera carrera de la temporada 2023 de la Fórmula 1. Max Verstappen al frente mantiene el liderato por tan solo un punto; el neerlandés no lo tendrá tan fácil, pues al parecer ahora su compañero puede ser su principal rival.
El primer contacto en el golfo Pérsico
Fue en Bahréin donde salieron los monoplazas a rodar fuera de los test de pretemporada y los primeros indicios de la historia a narrar durante esta temporada. Con sorpresas buenas para escuderías como Aston Martin, que mostró un rendimiento para pelearle a los toros rojos, (actuales campeones) y que se les pronostica una excelente temporada.
Los Williams han presentado avances importantes en comparación con los últimos 3 años. Por otro lado, se tienen decepciones como McLaren que ha dejado de ser de los mejores de la media tabla. Este primer round se lo llevó el León holandés, con “Checo” Pérez y Fernando Alonso acompañándolo en el podio de ganadores, lo cual pone por delante a Max.
El siempre complicado Jeddah
El circuito de Jeddah es uno de los más difíciles del calendario, es una pista con 27 curvas en un entorno callejero con velocidades muy altas en curvas tan estrechas. Una falla en el auto de Verstappen lo haría quedarse hasta el fondo de la Q2 (15va posición), por mientras su compañero, el mexicano, Sergio Pérez, tomaría mano de la Pole Position para arrancar desde el frente de la parrilla por segundo año consecutivo, seguido de Fernando Alonso y George Russell (Mercedes) acompañando a Carlos Sainz (Ferrari) en la segunda fila.
El domingo comenzó con suposiciones de lo que pasaría en el supuesto de que Max Verstappen alcanzara al mexicano, ¿sería las ordenes de equipo desde el muro de mando el factor prevaleciente para beneficiar al neerlandés?, ¿le darían la oportunidad al mexicano?
En la primera vuelta, esas dudas quedaron en segundo término, cuando Pérez perdió la posición con Alonso por un mal arranque que más tarde recuperó en el 4to giro, para posteriormente separarse del resto con una diferencia clara y que parecía que alcanzaría un podio más después de conquistar Mónaco. Mientras tanto, su compañero de equipo, escalaba posiciones hasta que hizo su aparición el Safety Car por un fallo en el auto de Lance Stroll que lo sacó de carrera. Al final, el originario de Guadalajara sería el ganador después de que el equipo pidiera a Verstappen mantener las posiciones. La discordia surgió con el punto que otorga la vuelta rápida, ya que le fue arrebatado al campeón en el último giro desobedeciendo las órdenes, lo que le permitió mantenerse por un punto delante de Pérez.
Rivalidad en la cima
Desde lo sucedido en Brasil 2022 y los comentarios de Max Verstappen se ha calentado la situación al interior del paddock del equipo austriaco, aun cuando intentaron transmitir la comunicación sana al interior a través de sus redes sociales el desempeño de sus pilotos no lo refleja, con un joven bicampeón y un viejo lobo de mar que quiere alcanzar el campeonato, las cosas no parecen mejorar e incluso hace un guiño con lo sucedido de Hamilton y Rosberg en la temporada 2016. El equipo tiene una clara inclinación, pero en parte justificada por sus desempeños constantes si lo comparamos con los compañeros que había tenía durante su carrera.
Por ahora, todo parece indicar que la competición fuerte está en el mismo equipo, mientras que los fans esperan sea un encuentro emocionante y sano entre estos dos pilotos.
Veremos qué pasa este fin de semana en Melbourne.