Imágenes: Cortesía Lilián Torrescano
El majestuoso Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, fue el lugar idóneo para que Guadalupe Pineda deleitara al público que la ha acompañado durante cinco décadas de trayectoria artística.
Al filo de las 19:15 horas, su orquesta inició con un medley sonoro, al cual unos minutos la cantante se les unió elegantemente vestida con un conjunto blanco, un abrigo blanco con negro y un maletín negro en la mano, dando inicio así a este viaje musical compuesto por sus ya temas clásicos y otros más rindiendo un merecido homenaje a grandes compositores de México, Latinoamérica y Francia como María Grever, Armando Manzanero, Elena Valdemar, Édith Piaf, Chabuca Granda y Pablo Milanés.
“Muchas gracias por estar aquí, muchas gracias por esta noche hermosa, este regreso al hermosísimo Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, que la vida se hace de momentos y hoy más que nunca lo aprendimos con estos difíciles momentos que pasamos en pandemia, por eso la vida hay que vivirla intensamente”, emotivamente fueron las primeras palabras que dedicaría a sus fanáticos.
De tal suerte pudimos deleitarnos, por espacio de dos horas y media, con la magistral voz de Pineda al interpretar “Momentos”, “Mi unicornio azul”, “Cambia”, “Cuando vuelva a tu lado”, “La vida en rosa”, “Mucho corazón”, “Fina estampa”, y “Gracias a la vida”.
Llegaría el momento de presentar con mucha emoción a su hija Mariana Gurrola con quien interpretó a dueto “Solo para ti” de Mario Domm, para después cantar en solitario “Ayer me dijo un ave”,
Continuaría la oriunda de Guadalajara con “Cómo fue” y un popurrí romántico de Manzanero con “Aquel señor”, “Esperaré”, “Contigo aprendí” y “Nos hizo falta tiempo”; después vendrían “20 años”, “Piel Canela” y “El andariego”.
Casi para finalizar la velada, tocaría el turno a los clásicos rancheros como "Urge" de Martín Urieta, "Tragos amargos", “Te sigo amando”, "Cielo rojo" y “Deja que salga la luna”.
Para cerrar con broche de oro, cantó “Coincidir” y la más esperada de la noche, “Yolanda”.