Imágenes: Cortesía Square Enix | Gameplay PoluxWeb.com
Video: Cortesía Square Enix
Las primeras aventuras de los hermanos Erik y Mia en busca de las siete legendarias Dragonstones son reveladas con la llegada de “Dragon Quest Treasures” al Nintendo Switch.
Toda historia tiene un principio
Erik y Mia son bien conocidos por su aparición en “Dragon Quest XI: Echoes of an Elusive Age”, lanzado en 2017 y ahora podemos controlarlos en esta nueva entrega de la entrañable franquicia “Dragon Quest” que data de 1986 y que se ha convertido en todo un referente del género. En esta ocasión, los hermanos se embarcan en una aventura a través del mundo de Draconia, junto con sus singulares criaturas Purrsula y Porcus, en búsqueda de tesoros y particularmente de las Dragonstones.
Durante nuestro recorrido, nuevas criaturas se suman a nuestra causa, formando equipos de cuatro integrantes; cada una con sus habilidades particulares que nos ayudan a encontrar tesoros escondidos y a alcanzar lugares difíciles, pues algunas nos permiten planear, saltar grandes alturas o ser más sigilosos. Es así como nos encontramos ante un juego de exploración con sentidos de aventura, además de los infaltables combates, sin que estos sean del todo obligados. La narrativa está lo suficientemente bien lograda para mantenernos picados de principio a fin, con el humor necesario para aligerarla todavía más. Uno de los atractivos es que usamos a ambos hermanos por igual, meramente eligiendo con quién queremos embarcarnos en cada viaje.
La leyenda del tesoro escondido
El objetivo del juego obviamente es recolectar la mayor cantidad de tesoros y llevarlos a nuestro cuartel general con la finalidad de expandir nuestra base de operaciones. Para ello, debemos visitar diversas islas, cada una con monstruos que podemos reclutar, algo que resulta de lo más atractivo ya que, para emprender grandes búsquedas, debemos contar con el escuadrón adecuado, pues son justamente nuestros aliados los que nos muestran en dónde se encuentran los preciados objetos; para ello, primero se nos muestra una brújula apuntando hacia dónde dirigirnos y, al llegar al lugar de interés, los monstruitos se ponen impacientes por lo que basta activar su visión para que se nos muestre el punto exacto desde los ojos de cada uno; no obstante, no resulta tan obvio por lo que muchas veces hemos de recorrer el área.
No es nada difícil ir creciendo nuestro botín, pero sí lleva su tiempo dada la gran cantidad de cofres que hay. De hecho, también podemos asignar a un grupo de monstruos para que vayan por un tesoro en particular, sin que nosotros los acompañemos, repercutiendo meramente en tiempo de juego; evidentemente sí importan los miembros del equipo si no queremos que fallen en la misión. De hecho, antes de emprender cada aventura se nos muestra el porcentaje de éxito esperado, mucho depende también del nivel de nuestros aliados y de los enemigos de cada zona en donde también existen objetos rompibles que guardan alguna que otra curiosidad.
Un RPG menos exigente
Como buen RPG, hemos de hacerles frente a diferentes enemigos que van surgiendo durante nuestro recorrido por el mundo. La mecánica de combate es sencilla; contamos con un ataque básico cuerpo a cuerpo y también podemos desatar un poder especial con cada acompañante, siempre considerando una barra de carga. También contamos con una resortera con municiones de diferentes piedras, aunque se usa menos frecuente de lo que bien pudo explotarse. En cualquier caso, nuestro equipo se vale por sí mismo para acabar con los contrincantes sin que nosotros intervengamos necesariamente; eso sí, de enfrentar a rivales más poderosos es posible que debamos revivir a alguno de los nuestros que caiga en batalla y además recuperar el botín, pues cada uno lleva consigo alguno de los tesoros encontrados, por ello es mejor regresar a la base para guardarlos antes de enfrentar peligros mayores.
Por otro lado, cabe mencionar que podemos guardar el juego en cualquier momento desde el menú de pausa, pero la idea original es usar las hogueras regadas por los diversos escenarios para así recuperar los PC y PM; esto implica, sin embargo, que el tiempo pase de día a noche o viceversa lo que puede afectar en completar o no algunas misiones que solo están disponibles por un día.
“Dragon Quest Treasures” no es de esos títulos con opciones de personalización o atributos que mejorar como normalmente ocurre en los RPG, más bien se centra en contar una historia sin que el desarrollo propio del juego presente un reto mayor. Claro que cuenta con misiones secundarias, así como algunos objetos que nos permiten mejorar nuestra base sin demasiadas complicaciones, ni tanta profundidad como otros títulos de la saga. Vale la pena acotar que incluso existen indicadores claros en el mapa y el HUD que nos indican en dónde se encuentran los puntos de interés que sigue la historia.
Brillante cual oro
Aunque las texturas se perciben un tanto genéricas, visualmente “Dragon Quest Treasures” cuenta con una rica paleta de colores que da vida a todos los paisajes y elementos que conforman los escenarios, mientras que el diseño de personajes, como es costumbre, pertenece a Akira Toriyama, con un render cel shading. Corre de manera muy estable en el Nintendo Switch tanto en modalidad portátil como de sobremesa; no obstante, existen algunos brincos en el render de ciertos elementos, aun con la limitada profundidad de visión.
La banda sonora es sumamente adecuada, digno de las características composiciones de Koichi Sugiyama (+), siendo éste su último trabajo para la franquicia para la cual trabajó desde el primer título. Los diálogos se presentan hablados en inglés y japonés (seleccionable en cualquier momento), pero solo para dar introducción a los globos de textos, mismos que han sido localizados al español, destacando que existen algunas interacciones con NPC de forma básica.
Una aventura amena
“Dragon Quest Treasures” es un juego bastante digerible a comparación de otros títulos del género que nos invita a disfrutar una historia precuela; de hecho, tampoco estamos ante un juego demasiado largo, terminarlo puede ocuparnos poco más de 20 horas, aunque debemos invertir un poco más para conseguir absolutamente todo. Por ello, hay quienes lo han considerado más como una extensión de “Dragon Quest Monster Joker”.
Ya disponible para Nintendo Switch, “Dragon Quest Treasures”, es un juego que encaja muy adecuadamente en el concepto de la consola híbrida, pues permite sesiones de juego largas y cortas de igual manera, con un ritmo bastante ligero que nos invita a continuar en la búsqueda del tesoro de manera adictiva.
Distribuidor: Square Enix
Desarrollador: Tose
Género: RPG
Plataformas: Nintendo Switch
Duración aproximada: Principal: 22 hrs. | Completo: 28 hrs.
Idiomas en audio: Inglés, Japonés
Idiomas en texto: Español, Inglés
Modo en línea: No
Jugadores locales: 1
Jugadores en línea: –
ESRB: Teen
Fecha de lanzamiento: 9 de diciembre de 2022
Precio: NS: MXN $1,200.00
Reseñado en: Xbox Series X gracias a un código otorgado por Square Enix
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