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“Kingdom Come: Deliverance II” continúa la épica aventura de Henry en la Europa del siglo XV. Desarrollado por Warhorse Studios, este RPG de acción ya está disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC, listo para sumergirnos profundamente en la Bohemia de 1403, donde cada decisión tiene consecuencias.
Más que un juego, una simulación de época
Desde el primer momento, “Kingdom Come: Deliverance II” nos sumerge en un mundo auténtico, atrapándonos con su narrativa cinematográfica y realismo histórico al apoyarse en ciudades medievales, paisajes rurales y personajes memorables. Esta entrega no solo profundiza en la propuesta cruda de su predecesor, lanzado en 2018, sino que eleva la inmersión con un mundo vivo, entregando combates viscerales y exigentes, así como un mayor peso a las decisiones morales dado que todas las interacciones cuentan.
Sin niveles de dificultad a elegir, “Kingdom Come: Deliverance II” es más que un juego; prácticamente se convierte en una máquina del tiempo que reconstruye meticulosamente aldeas de la Bohemia sumando diálogos que emanan autenticidad. De esta forma, la campaña principal se se convierte en un viaje épico lleno de giros inesperados y desafíos con una gran variedad de actividades que mantienen al jugador comprometido ante una experiencia de juego única en su estilo, pese a que, por momentos, la trama puede volverse lenta sin dejar de ser relajada, con tonos dramáticos y uno que otro gag.
La Bohemia del siglo XV
Aunque no se modifica en su columna vertebral, la historia se desarrolla con un extensísimo guion a través de decisiones ramificadas que afectan el mundo que nos rodea. “Kingdom Come: Deliverance II” es una secuela directa, por lo que nos encontramos después de los eventos de su predecesor tomando control de Henry, quien acompaña a Hans Capon rumbo al Castillo de Trosky con la misión de entregar un importante mensaje a Otto Von Bergow; sin embargo, la comitiva es atacada quedando solo ellos dos con vida.
Henry y Hans se ven en una situación delicada al haber perdido todas sus pertenencias, teniendo que ganarse la confianza de cada pueblo en el que se presentan; no obstante, Hans no piensa perder su estatus y eso complica aún más la situación inicial. A partir de este momento, la línea entre una propuesta de un RPG convencional y uno que roza la simulación de vida se vuelve demasiado delgada con una importante curva de aprendizaje, lo que resulta en un comienzo casi tedioso, pero que eventualmente gana una credibilidad difícil de igualar.
Ya avanzada, la trama toma giros interesantes entre política, traiciones y hasta romances que pueden ponernos contra la pared y con tiempo limitado para actuar. Cabe remarcar que “Kingdom Come: Deliverance II” está inspirado en la Historia real tomando la Guerra de los Husitas como contexto histórico, cuando la tensión religiosa y política sacudía a Europa; como siempre, el poder era el objetivo. El juego, entonces, sabe sacar provecho de este entorno creando un mundo vivo y reactivo.
Complejidad del sistema de juego
Los controles nos permiten desplazarnos libremente por el extenso mundo abierto, correr, saltar, agacharnos, interactuar, así como apuntar y disparar o bloquear y atacar. Lo mejor es que se saca provecho al DualSense del PlayStation 5 con la vibración háptica, los gatillos adaptativos y hasta el LED que se adapta según el estado del protagonista; por ejemplo, cambia de color cuando está cansado o parpadea en rojo cuando hay una importante hemorragia, lo que incluso llega a ser útil entre tantos elementos.
“Kingdom Come: Deliverance II” es un título denso que exige bastante dedicación del jugador para sacarle todo el jugo posible. De tal forma, ofrece una variedad importante de mecánicas que no se pueden pasar por alto pues debemos considerar un buen puñado de factores para cumplir objetivos y, de paso, sobrevivir en ambientes desconocidos y hostiles. Es así como debemos aprender y dominar habilidades de combate, exploración, alquimia, herrería, supervivencia y hasta persuasión a la hora de dialogar con otros personajes; vaya, hasta nuestra apariencia afecta la forma en que los demás nos perciben.
El sistema de combate causa una que otra frustración, al menos en un inicio, al tratar de dominar las direcciones de defensa y ataque. Personalmente, durante los primeros enfrentamientos, me cuestionaba una y otra vez por qué ni siquiera tenía una espada en mis manos cuando se supone ya la había elegido, mientras el enemigo no dudaba en golpearme o acuchillarme sin piedad; lo mismo ocurría con la ballesta al no poder disparar mientras mis compañeros de combate (IA) se hacían cargo de todos los adversarios. Pasando el punto de prueba y error con mucha paciencia, el juego vuelve a cobrar un nuevo significado con combos incluidos y una satisfacción comparable con ganar una batalla real. Cabe acotar que, aunque hay duelos épicos y asedios a gran escala, la acción tiende a ser aislada.
El arte de la guerra y la diplomacia
La gran fortaleza de “Kingdom Come: Deliverance II” es precisamente el incansable realismo que representa cada acción. Por ejemplo, para vestir una armadura debemos hacerlo tomando en cuenta el orden para ciertas partes, mientras que poner la montadura a un caballo tiene su chiste. Además, como en todo juego, llega a ser muy tentador entrar y salir de las construcciones e incluso tomar cosas que están a fácil acceso, pero si un guardia nos cacha, debemos enfrentar una multa y hasta castigos cuya repetición va menguando la reputación.
Por si fuera poco, algunas misiones solo pueden cumplirse a cierta hora del día o bajo cierto límite de tiempo. De tal suerte, el ciclo día y noche está presente con una satisfactoria implementación que permite adelantar algunas horas, además de dormir, acción que nos permite guardar la partida y recuperar salud, pero que implica que la digestión haga su trabajo y el hambre invada a Henry; entonces, también hay que buscar alimento, sin olvidarnos de asearnos para mantener una presentación y olor adecuados ante los demás. Y hablando de olfato, también contamos con un fiel compañero canino con sus propias virtudes.
En fin, existen muchísimas actividades que finalmente se convierten en un estilo de vida virtual ante la plena libertad que nos ofrece el juego. Y una vez que contamos con un caballo a nuestra disposición, así como los viajes rápidos en el mapa, el ir y venir es obligado, pero hay sitios en donde andar a pie es la única posibilidad. En todo caso, conforme más días pasamos bajo la piel de Henry, éste va definiendo una personalidad más sólida como soldado, consejero o explorador de acuerdo con nuestras decisiones. Al final, tanto Henry como los demás personajes, incluso los NPC, irradian personalidad.
Persuasión y evolución como herramientas vitales
La persuasión es fundamental durante nuestra interacción social. Henry va modificando su actitud en cuanto a carisma y reputación, permitiendo tener mejores respuestas de los habitantes de cada lugar, regatear con comerciantes en un minijuego, y hasta lograr que nos condonen algunos actos delictivos menores. En un mundo en donde la desconfianza es parte del estilo de vida, este factor se convierte en un arma más durante nuestra aventura, pero también tiene su chiste entender y dominar cómo funcionan las puntuaciones de nuestra labia.
A todas las posibilidades, se le suman incontables detalles que nutren todavía más de autenticidad nuestra vida en el medievo. Ya sea algo visual o jugable, hay elementos que nos hacen sentirnos verdaderamente en los botines de Henry que siempre logra transmitir su entusiasmo, hastío, necesidades y deseos, según el caso. Por supuesto, el personaje tiene una gran cantidad de atributos que se ven afectados por las armas y armaduras que portemos, sin mencionar que, de llevar mucho peso en nuestra bolsa, perdemos agilidad; afortunadamente existen baúles donde podemos guardar cosas, así como puntos de venta para deshacernos de otras, ganando así un poco de dinero.
El sistema de progresión puede sentirse lento. La experiencia aumenta conforme más cosas hacemos dentro de todo el mundo, mientras que las ventajas a desbloquear son muy variadas por lo que es común encontrar algo nuevo a cada paso. Además, la memoria del juego es tan peculiar que los NPC recuerdan lo que antes hemos hablado y eso ayuda a que nuestra evolución sea orgánica con el mundo en el que vivimos y que constantemente ofrece algo que puede llamar nuestra atención al grado de que, al mínimo distractor, podemos desviar nuestro camino de la historia principal para cumplir con las secundarias, mismas que siempre resultan interesantes.
Viaje épico en la Europa Medieval
Las misiones principales y opcionales tienden a ser muy contundentes; no obstante, la libertad por el mundo abierto puede hacer que nos sintamos perdidos sin saber hacia dónde dirigirnos de vez en cuando, pero basta con ir entendiendo también cómo funciona el mapa y sus indicadores para tener mayor sentido de referencia. En ciertas ocasiones, el mismo juego nos ofrece una “ayudadita” permitiendo que nuestro personaje siga el camino automáticamente, mientras nosotros nos dedicamos a disfrutar del hermoso paisaje natural.
El menú de pausa no es un simple añadido, sino una extensión esencial para integrar todos los elementos a nuestro viaje. En él podemos consultar nuestro extenso inventario, el basto mapa, las misiones y una auténtica enciclopedia con información de lugares y personajes encontrados al momento, algo que cobra relevancia ya que hay algunos que parecen no tener mucha importancia hasta que nos los volvemos a encontrar con las repercusiones de nuestras acciones pasadas, para bien o para mal. Eso sí, la interfaz puede volverse un poco sobrecogedora ante tanta información.
“Kingdom Come: Deliverance II” no es particularmente un juego difícil, pero su curva de aprendizaje es elevada, sobre todo al inicio en donde sí es común pasar por varias frustraciones de diferente índole, sobre todo porque el guardado del juego depende específicamente de ciertos eventos de la historia que pueden ser largos, o de encontrar un lugar propio para dormir. También podemos guardar el avance consumiendo Schnapps Redentor; aunque para ello, necesitamos los ingredientes necesarios para prepararlos.
Un mundo que respira
El diseño de producción es una carta de amor al siglo XV con una estética que retrata perfectamente la época en que se desarrollan las acciones e inevitablemente nos recuerda producciones como “El Señor de los Anillos” sin la parte fantástica. El juego es genuinamente un festín visual gracias a los atinadísimos materiales y texturas, ciclo día y noche que presume la excelsa iluminación, modelado realista de personajes llenos de rasgos y expresiones únicas, así como un espectacular ray tracing. Cabe destacar que presenta opciones para priorizar el desempeño o la fidelidad, siendo la primera opción la más recomendable.
Tristemente, no todo es perfecto. Hay algunos bugs que, si bien no afectan la experiencia de juego, sí son muy notorios; por ejemplo, las colisiones llegan a pasarse por alto y constantemente encontramos algunos personajes perforando a otros o algunos momentos en que las acciones de los NPC se quedan “trabadas”. Además, presenta mucho popping, algo que puede llegar a ser entendible ante la abundante cantidad de elementos en pantalla que generan una sensación de profundidad plausible y sin pantallas de carga. Por cierto, incluye un modesto modo foto.
Completa inmersión auditiva
La banda sonora es de altísimo nivel con composiciones orquestales en donde todos los instrumentos y coros lucen épicamente. Los efectos de sonido están magistralmente distribuidos para un teatro en casa o audífonos de alta calidad para disfrutar envolventemente de las hojas crujiendo bajo las botas, la lluvia cayendo inclementemente, los pájaros cantando, el choque de espadas, etc. Incluso el tambor en los menús le da una identidad brutal al juego, complementándose con una sutil vibración del control.
Todas las voces están dobladas al español castellano con un gran trabajo; otros idiomas incluidos son inglés, francés, alemán y checo; aunque es importante señalar que se debe descargar el paquete de voz correspondiente. Todos los textos en pantalla están localizados al español, inglés, francés, alemán, italiano, portugués, ruso, japonés, chino, polaco, checo, turco, coreano y ucraniano. Llama mucho la atención que, cuando hay diálogos en el mundo abierto, los subtítulos se integran encima de los personajes que están hablando.
Leyenda forjada
“Kingdom Come: Deliverance II” es un juego ciertamente diferente a los de su género gracias al nivel de detalle y realismo en su propuesta, misma que es tanto desafiante como gratificante. Si bien tarda en despegar, es fácil quedarse enganchado desde los primeros momentos gracias a sus carismáticos personajes e intrigante narrativa que, si bien no es una que descubre el hilo negro, sirve de pretexto para involucrarnos socialmente en la Edad Media.
“Kingdom Come: Deliverance II” es una obra de arte medieval, pero es importante aclarar que no es para todo tipo de jugadores. Su ritmo pausado, curva de dificultad empinada y sistemas complejos lo convierten en una experiencia para jugadores pacientes y curiosos, sobre todo para aquellos amantes de la historia medieval, los RPG profundos y quienes disfruten de narrativas morales. En definitiva, es un título que exige tiempo pues no se avanza mucho en sesiones cortas, pero su progresión es sumamente gratificante una vez que estamos inmersos de lleno en su propuesta.
“Kingdom Come: Deliverance II” ya se encuentra disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC.
Detalles de Kingdom Come: Deliverance II
Distribuidor |
Plaion | Deep Silver |
Desarrollador |
Warhorse Studios |
Género |
RPG | Acción | Survival |
Plataformas |
· PlayStation 5 · Xbox Series X|S · PC (Steam) |
Duración aproximada |
· Principal: 65 horas · Completo: 100+ horas |
Idiomas en audio |
Español (Castellano), Inglés |
Idiomas en texto |
Español, Inglés |
Modo en línea |
No |
Jugadores locales |
1 |
Jugadores en línea |
– |
ESRB |
Mature |
Fecha de lanzamiento |
4 de febrero de 2025 |
Precio |
· PS5: USD $69.99 · XSX|S: MXN $1,199.00 · PC: MXN $950.00 (Steam) |
Pros y Contras de Kingdom Come: Deliverance II
Pros |
· Visual y sonoramente impactante · Realismo hasta en los mínimos detalles · Plena inmersión |
Contras |
· Elevada curva de aprendizaje · Lenta progresión · Historia pausada con misiones, a veces, no muy claras |
|
9.0/10 |
Reseñado en: PlayStation 5 gracias a un código otorgado por Binary Haze Interactive.