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Video: Cortesía Ubisoft Entertainment

“Assassin’s Creed Shadows” marca un nuevo amanecer para la saga, llevándonos al Japón del siglo XVI combinando la tradicional narrativa histórica con una evolución palpable del gameplay. El título ya está disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC. ¿Logra honrar el legado de la saga mientras traza un nuevo camino? Vamos a descubrirlo.

El renacer del credo de asesinos

Ubisoft Québec, estudio responsable del épico “Assassin’s Creed Odyssey”, ha sido el responsable de traer a nosotros “Assassin’s Creed Shadows”, título que, previo a su lanzamiento, pasó por una marea de polémicas entorno a su protagonista, mostrándose con tez oscura en pleno Japón feudal. Afortunadamente, los responsables han sabido incluirlo y darle su lugar de manera tan respetuosa como genuina para lograr una experiencia narrativa completamente entrañable que bien puede servir de ejemplo para muchísimas producciones, no solo de videojuegos, sino cinematográficas.

Con cuatro niveles de dificultad, la historia de “Assassin’s Creed Shadows” nos remonta al siglo XVI, girando entorno de Yasuke, un esclavo forastero que se transforma en samurái histórico, y Naoe, una shinobi de una tranquila aldea llamada Iga. Sus caminos se entrelazan a causa de la guerra civil, en la que Oda Nobunaga intenta moldear el futuro de una unificada nación. Es así como la trama se desarrolla entre el honor marcial de Yasuke y la astucia sigilosa de Naoe, ofreciendo perspectivas únicas al darnos control de ambos personajes en sus respectivos momentos; no obstante, es a la shinobi a la que controlamos ampliamente durante la primera etapa en su búsqueda de venganza, no sin antes darnos una idea del poderío del samurái.

Dos almas, un destino

La dinámica entre estos personajes, inicialmente me recordó a la presentada en “Assassin’s Creed Syndicate”, donde alternábamos entre dos hermanos con habilidades y perspectivas distintas, pero, en realidad, “Assassin’s Creed Shadows” ha sabido implementar mucho mejor el sistema para tener a dos protagonistas de acuerdo con la narrativa. Por un lado, Yasuke domina enfrentamientos directos con su katana, usando bloqueos precisos y ataques cargados que rompen defensas; Naoe, en cambio, reina en las sombras con asesinatos silenciosos, creando distracciones y realizando parkour sobre construcciones.

En cualquiera de los dos casos, el gameplay se adapta al mismo control, por lo que es muy sencillo dominar ambos estilos. De tal forma, podemos desplazarnos libremente por los inmensos escenarios, correr, agacharnos, ponernos pecho a tierra, atacar normal o fuertemente, bloquear, esquivar y lanzar objetos como shurikenes, bombas de humo o flechas. Desde luego, al paso de la aventura, subimos de nivel y ganamos puntos de maestría para desbloquear nuevas habilidades. Lo mejor es que igualmente podemos desbloquear armamento y equipo para la armadura que además de servir para personalizar el atuendo, repercute en los atributos como salud y fuerza. Y claro que hay tiendas y comerciantes en donde podemos vender y comprar con la moneda del juego: mon.

Naoe porta la característica hoja de asesinos para eliminar a los enemigos por sorpresa, pero también carga una katana para enfrentamientos cuerpo a cuerpo, así como tantō (un cuchillo tradicional japonés) y una kusarigama (una hoz con una cadena y un contrapeso en el extremo), ideal para cuando somos rodeados. Por su parte, Yasuke porta armas más poderosas: Una katana larga, una naginata (una asta con una hoja curva afilada en un extremo), un kanabo (un bastón con púas), un arco y un teppo (arma de fuego).

Experiencia inmersiva

Aunque no con demasiada profundidad, “Assassin’s Creed Shadows” saca provecho al DualSense del PlayStation 5. El altavoz emite algunos sonidos menores, el LED cambia de color según las situaciones que están sucediendo, y las vibraciones acompañan con la intención debida los combates, así como otras acciones. Sin duda es una capa no esencial, pero sí agradable para hacer más inmersivas las embestidas de Yasuke y el parkour de Naoe quien, por cierto, cuenta con un gancho para balancearse y alcanzar zonas elevadas. Por cierto, Naoe puede realizar el salto de fe sin problemas, mientras que Yasuke… no es su fuerte.

Es de destacar que, durante las cinemáticas podemos interactuar eligiendo entre algunos diálogos predefinidos, además de algunas acciones. Estas decisiones afectan las misiones posteriores; sin embargo, existe un Modo Canónico que desarrolla la historia sin alteraciones por parte del jugador. Asimismo, se incluye una Exploración Guiada con la cual se muestran los objetivos de las misiones en todo momento; si se desactiva, debemos implementar un Sistema de Exploradores para investigar una zona en específico. De aquí que también valga la pena ir sumando aliados a nuestra causa, los cuales incluso pueden ayudar en combate ya sea para distraer a los enemigos o atacarlos cuerpo a cuerpo o a distancia; esto da mucha variedad al gameplay.

Un recorrido por el Japón feudal

El mundo de “Assassin’s Creed Shadows” es muy amplio, por lo que trasladarse de un lado a otro lleva su tiempo, pero siempre hay algo nuevo que descubrir, sobre todo algunos secretos que conllevan la obtención de jugosas recompensas, ya sea entrando a una laberíntica cueva o asaltando una zona custodiada por enemigos. Obviamente regresa la vista de águila (exclusiva de Naoe) para tener un panorama amplio de toda el área, sirviendo además para viajes rápidos. También podemos montar un caballo para recorrer largas distancias; basta con llamarlo con un silbido para que rápidamente esté a nuestra disposición. Por cierto, nuestro fiel corcel cuenta con sus propios accesorios.

Por supuesto, siempre contamos con un mapa en el que podemos consultar los lugares visitados, así como aquellos por descubrir. En él podemos marcar puntos de interés y mandar a explorar a nuestro equipo. En el HUD principal contamos con una brújula que indica hacia donde están los objetivos ya sean las misiones, los marcadores personales o los tesoros. Adicionalmente, podemos activar una especie de guía GPS que nos indica el camino ideal a seguir para llegar a cierto sitio; algo útil, sobre todo, en los bosques donde es fácil perderse (o trabarse porque sí, hay bugs).

Uno de los elementos llamativos de “Assassin’s Creed Shadows” es su experimentación con la construcción y personalización de nuestra propia guarida. En este terreno debemos levantar construcciones que tienen su propósito incluso para la historia principal, pero que bien pudo haberse omitido sin mayor repercusión. Claro que, si ya se incluyó, sabe impulsarnos a darle un toque personal tanto en su acomodo como con adornos en pisos y paredes; e incluso podemos adoptar a una linda mascota. En este lugar, es posible forjar armas, entrenar a los aliados y racionar los consumibles.

Fuerza y táctica en un entorno aprovechado

Los enemigos en “Assassin’s Creed Shadows” no son realmente difíciles; basta con ver el destello previo a su ataque para saber si es un golpe bloqueable, uno que es mejor esquivar o si soltará una secuencia de ataques. Si actuamos en el momento justo, el rival queda completamente vulnerable. Las cosas cambian cuando somos rodeados pues tenemos que prestar más atención por todos lados. Para el caso del sigilo, hay aciertos y bemoles: Por un lado, aun cuando parece que podemos tomar por sorpresa al enemigo y dar el golpe definitivo, pueden esquivarnos; por otro, a veces resulta risible que no somos detectados ni siquiera pasando muy cerca de los enemigos (las mujeres tienden a estar más alerta para avisar de nuestra presencia).

El juego sabe sacar ampliamente beneficio del entorno para una profundidad táctica. Particularmente el cambio de clima funciona gratamente para no ser detectados con facilidad, pero igualmente los arbustos se mantienen como los mejores aliados para ocultarnos y tomar desprevenidos a los enemigos para ocultarlos rápidamente; además, existen otros lugares donde podemos esconder a nuestras víctimas para no levantar sospechas. También podemos aprovechar el shōji (paredes de papel) para asesinar por sorpresa a alguien. Por cierto, existen los cambios de estación y estos no solo se ven reflejados visualmente, sino que influyen para que los exploradores regresen, e impactan en la movilidad de los personajes; no es lo mismo combatir bajo los rayos del Sol que bajo una tormenta o en la nieve.

Es justo decir que la progresión de “Assassin’s Creed Shadows” es un tanto irregular a lo largo de sus tres largos actos que conforman la campaña, además del prólogo y epílogo. En un principio, el avance suele ser gradual, aunque también es cierto que los objetivos no son del todo claros; no obstante, ya en el tercer acto, el crafteo empieza a ser fundamental, por lo que las misiones secundarias tienen mucho más peso y sentido. A esto se le suma el sistema de puntos de sabiduría, mismo que debemos incrementar para desbloquear ciertas mejoras.

Más allá del honor y la venganza

Las misiones secundarias son tan vastas como variadas. Conforme recorremos las tierras feudales, podemos encontrar santuarios para rezar, otros lugares para meditar (minijuego QTE rítmico) y entrar a una memoria pasada, recuperar cartas, buscar tesoros en cuevas, y cumplir con contratos que pueden pedir recuperar recursos o asesinar a un objetivo en específico, etc. Como curiosidad, Naoe sabe dibujar y, para relajarse de su sangrienta aventura, debe acercarse lo suficiente a algunos animales (sin asustarlos) para plasmar su belleza en lápiz y papel.

Otra novedad que llega con “Assassin’s Creed Shadows” es el Animus Hub, un launcher que incluye a este título, así como a “Assassin’s Creed Origins”, “Assassin’s Creed Oddyssey”, “Assassin’s Creed Valhalla” y “Assassin’s Creed Mirage”; siempre y cuando se encuentren instalados. Algo así como lo han implementado ya “Hitman” y “Call of Duty”. En este mismo “menú” se encuentran los registros del mundo y personajes conforme se desbloquean durante nuestra campaña, algo muy atractivo para ampliar nuestros los conocimientos de Japón.

El Edo cobra vida

Utilizando el motor Anvil, “Assassin’s Creed Shadows” ofrece uno de los mundos abiertos más detallados y visualmente sorprendentes de la saga gracias a su tremendísimo diseño artístico. Los paisajes van desde bosques de bambú bañados por la luz del Sol hasta castillos fortificados bajo tormentas eléctricas. La iluminación en tiempo real y las sombras dinámicas crean atmósferas verdaderamente cinematográficas, especialmente al amanecer o durante un tifón. El modo foto, aunque limitado en filtros, captura escenas épicas, reforzadas por las impecables expresiones faciales de los personajes. Por si fuera poco, el juego permite elegir entre opciones de rendimiento y calidad, así como una equilibrada para que corra a 40 fps manteniendo cierta fidelidad de gráficos.

La banda sonora, compuesta por temas tradicionales con toques orquestales, cumple su rol de ambientar escenas épicas o momentos íntimos, pero carece de melodías memorables; aun así, refuerza la autenticidad del Japón feudal. Los efectos ambientales son hiperrealistas y generan la mejor sensación envolvente con auriculares o teatro en casa.

El juego llega con doblaje al español castellano, inglés, francés, portugués y japonés (hay que descargar el paquete correspondiente). Las voces en japonés e inglés destacan por su actuación emotiva, pero el español demerita ligeramente los matices; lo recomendable es activar el Modo Inmersivo que mezcla el japonés con el portugués, de acuerdo con el lugar en donde se desarrollan las acciones. Entre tanto, todos los textos se encuentran localizados al español, inglés, francés, japonés y portugués.

Una nueva era para Assassin’s Creed

“Assassin’s Creed Shadows” es un título sumamente sólido que da un manotazo sobre la mesa dejando en claro cómo se pueden tratar franquicias ya existentes para incluir algunas exigencias de la sociedad actual, incluso forjando una nueva historia sobre una época real. Más allá de esto, su narrativa, gameplay y aspectos técnicos dan como resultado un juego redondo que se posiciona entre los mejores de la franquicia, convirtiéndose en un extraordinario viaje para los fans de toda la vida, pero también para aquellos que se suman por primera ocasión, incluso para los amantes de la cultura japonesa.

Dada la naturaleza de los personajes, exponiendo sus orígenes, situaciones y motivos, “Assassin’s Creed Shadows” acentúa temas como la identidad y el legado. Los momentos emotivos permiten que los personajes conecten con el gamer; sin embargo, también es cierto que la historia puede alargarse de más y esto hace que el ritmo decaiga conforme más avanzamos sin que se pierda la atención y el interés del jugador.

“Assassin’s Creed Shadows” ya se encuentra disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC.

Detalles de Assassin’s Creed Shadows

Pros y Contras de Assassin’s Creed Shadows

Reseñado en: PlayStation 5 gracias a un código otorgado por Ubisoft Entertainment.

Trailer de Assassin’s Creed Shadows