Imágenes: Cortesía Funbox Media | Gameplay PoluxWeb
Video: Cortesía Funbox Media
En una época donde los simuladores de carreras se han ganado un lugar por excelencia en la industria, ocasionalmente salen a la luz propuestas más casuales como “Classic Racers Elite” para que jugadores menos exigentes puedan competir por pura diversión. “Classic Racers Elite” está disponible para Nintendo Switch.
Por el gusto de correr
“Classic Racers Elite” es un juego de carreras sin mayor pretensión que ponernos al volante de un auto y echarnos a competir en pruebas contrarreloj bajo un formato rally al tener que llegar de la base de una colina a la cima lo más rápido posible, olvidándonos por completo de la personalización de coches y de las engorrosas configuraciones de la física; esto no quiere decir que se convierta en un título netamente arcade, pero definitivamente está lejos de ofrecer un realismo pleno. En todo caso, podemos elegir entre transmisión automática o estándar y un par de ajustes de velocidad y dirección.
Anticipado en su nombre, “Classic Racers Elite” enfoca la estética de los vehículos en los clásicos, específica en aquellos de los años 60’s, dividiéndolos en cuatro categorías que se sienten ligeramente diferentes entre sí. La curiosidad llega con los nombres de las marcas y es que, al no contar con las licencias, el estudio francés Vision Reelle optó por recurrir a nombres parecidos como lo hacía “International SuperStar Soccer” en su momento; es así como encontramos marcas como Perillo, Winner y Fred, haciendo alusión a Pirelli, Champion o Ford, incluso con los logos.
Cuenta con 12 campeonatos que se desarrollan en 17 diferentes locaciones, dando un total de 50 pistas. Emulando un rally, corremos sin que haya más pilotos a nuestro alrededor. Los recorridos suelen duran poco tiempo normalmente con el objetivo de completar cada uno, reflejando los puntajes en una clasificación global, por lo que podemos retarnos aún más para ser el mejor de todos; el gran problema es que no podemos volver a cursar una carrera que hayamos superado y que debemos cumplir obligatoriamente con el tiempo establecido en todos los eventos para desbloquear los cuatro subsecuentes.
Atrapado entre la simulación y el arcade
Los controles son tan convencionales como un juego de automovilismo, pero tan simples como para solo ofrecernos aceleración y frenado (pedal y de mano). Ya de nosotros depende la habilidad al volante, logrando sacar algunos derrapes para favorecernos en algunas curvas. Nada del otro mundo, simplemente es pisar el acelerador y tratar de acabar tan pronto como sea posible, teniendo como mayor reto el Modo Slalom, en el debemos esquivar varios obstáculos que se encuentran a lo largo de las pistas volviéndolo ligeramente más desafiante.
Cabe mencionar que no existe un rebobinado por si nos equivocamos y queremos reintentar el mismo tramo de pista, algo hasta cierto punto lógico dado que son recorridos muy cortos. En su lugar se incluye un botón para reiniciar la carrera de forma inmediata. También cabe señalar que, si nos salimos de la pista o quedamos llantas para arriba, en tan solo 3 segundo hacemos respawn; sin embargo, en más de una ocasión, podemos quedar atascados sobre algunos obstáculos y la única solución es reiniciar la carrera.
Echando lámina
Gráficamente “Classic Racers Elite” es tan modesto como en toda su mecánica de juego, pero resulta lo suficientemente atractivo para dar una sensación genuina; y es que las texturas de las pistas funcionan, mientras que algunos elementos que las adornan denotan sus limitantes como el render de los árboles que van apareciendo desdoblándose. Pese a su sencillez gráfica, presenta una agradable profundidad gracias a su skybox y se esfuerza en los cambios de ciclo entre día y noche, así como gradas con público, aunque de forma reducida y acartonada.
Los protagonistas principales, los autos, lucen bastante durante toda la carrera, con fluidez en la animación. Cabe mencionar que en el modo portátil del Switch luce un ligero blur que no afecta en la experiencia. Gracias a las luces ubicadas con precisión, el juego muestra algunas tomas bastante atractivas, siempre con la natural posibilidad de cambiar hasta tres posiciones de cámara: trasera, sobre cofre y al volante; eso sí, no son del todo cómodas y mucho dependemos de ir revisando nuestro mapa en el HUD para anticipar las vueltas.
Ciertamente, el apartado sonoro ocasiona mucha monotonía durante las carreras; tanto la música como los efectos de sonidos son extremadamente genéricos. No hay voces, pero cabe resaltar que todos los textos llegan localizados al español, inglés, alemán, italiano, francés, polaco, ruso y chino.
Más clásico que elite
Por su propuesta, “Classic Racers Elite” es un juego ideal para el Nintendo Switch, considerando sesiones cortar de juego, sobre todo en modo portátil para aquellos momentos de ocio o de transporte ya que ciertamente es un título bastante humilde que no da para clavarnos demasiado tiempo o tratar de exprimirlo demasiado más allá de los poco que ofrece, al grado de sentirse un tanto repetitivo.
“Classic Racers Elite” ofrece lo que promete, ni más, ni menos. Puede sentirse como un juego muy limitado, pero al mismo tiempo su objetivo no es complicarse en absoluto. Así, tenemos una especie de simulador con tintes arcade con una mecánica de juego sumamente relajada. Se nota que los desarrolladores le pusieron cariño, pero también denota fragrantes limitaciones.
“Classic Racers Elite” ya se encuentra disponible para PlayStation 4 y Nintendo Switch. Próximamente llegará a Xbox One y PC.
Distribuidor: Funbox Media
Desarrollador: Vision Reelle
Género: Automovilismo
Plataformas: PlayStation 4, Nintendo Switch
Duración aproximada: Principal: 12 hrs. | Completo: 15 hrs.
Idiomas en audio: Inglés
Idiomas en texto: Español, Inglés
Modo en línea: No
Jugadores locales: 1
Jugadores en línea: –
ESRB: Everyone
Fecha de lanzamiento: 28 de junio de 2023
Precio: PS4: USD $29.99 | NS: MXN $559.99
Reseñado en: Nintendo Switch gracias a un código otorgado por Funbox Media
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